AUTORIDADES REGIONALES DAN INICIO AL NUEVO SERVICIO DE REINSERCIÓN SOCIAL JUVENIL EN ÑUBLE
La mañana de ayer autoridades regionales encabezadas por el Delegado Presidencial de la región de Ñuble, Rodrigo García Hurtado y el Seremi de Justicia y Derechos Humanos Ñuble, Cristopher Reyes Bórquez anunciaron la puesta en marcha del Servicio de Reinserción Social Juvenil en Ñuble, el cual será liderado por el director regional, Felipe Opazo Navarrete.
El nuevo Servicio Nacional de Reinserción Social Juvenil, fue creado por la ley N°21.527, es la entidad especializada responsable de administrar y ejecutar las medidas, sanciones y mediaciones contempladas por la ley sobre Responsabilidad Penal Adolescente y sus modificaciones.
Este es un servicio público especializado y descentralizado bajo la supervigilancia del presidente de la República a través del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, responsable de administrar y ejecutar las medidas cautelares y sanciones en el caso de jóvenes derivados por los tribunales imputados o sancionados por un delito cometido entre los 14 y 17 años 11 meses.
En la ocasión el Director Servicio, Felipe Opazo, comentó que “hoy estamos iniciando las funciones de este nuevo servicio, que tiene como objetivo velar por el cumplimiento de las medidas y sanciones de jóvenes que hayan cometido infracciones de ley, pero por sobre aquello, de trabajar en el proceso de reinserción social, esa es la tarea fundamental de trabajar de manera unida, no sólo desde el servicio, sino que con todos los sectores que tiene que ver con materia de reinserción como lo es Salud, Educación, Cultura, Deporte donde tenemos que buscar las mejores alternativas para que un joven, que en su momento haya tenido conflicto con la ley, no solo cumpla con alguna sanción o alguna medida, sino que por sobre aquello, genere un proceso de reinserción y vuelva a tener una vida asociada a la norma, a los derechos fundamentales de cada una de las personas”
Por su parte el Secretario Regional Ministerial de Justicia y Derechos Humanos de la región, Cristopher Reyes Bórquez, mencionó que “como Ministerio de Justicia y Derechos Humanos estamos muy contentos de poder formalmente dar el inicio a nuestro nuevo Servicio de Reinserción Social Juvenil en la región de Ñuble, el cual tiene cinco grandes ejes de cambio en relación a lo que era el Sename. La especialización es el punto más importante, donde cada uno de los jóvenes de nuestra región y a nivel país van a tener un acompañamiento individual, una política pública especializada para ellos y donde, sin duda, de acuerdo a los modelos mundiales, permite una reinserción mucho más efectiva y mucho más plena para los jóvenes de la región, lo que se busca como gobierno es que la reinserción sea posible y con ello satisfacer no solo proyectos de vida, sino que haga al final del día una sociedad más segura y más solidaria”.
Mientras que el Delegado Presidencial, Rodrigo García, destacó dos ámbitos que han sido fundamentales para el Gobierno del Presidente Gabriel Boric, “uno de estos es el ámbito de seguridad, creemos que este nuevo servicio va a permitir trabajar mejor con los jóvenes que han tenido conflictos con la ley y eso va a incidir directamente en la disminución de los delitos a futuro. Vemos que la forma cómo se está haciendo es profesionalizar el sector, mejorar la atención, porque efectivamente va a haber una mayor cantidad de funcionarios y una nueva institucionalidad, pero también que se trabaja articuladamente con el intersector, se va a trabajar con Educación, Deporte, Salud, el Ministerio de Desarrollo Social y Familia, pero también está presente aquí Fiscalía y Defensoría, que también van a tener un trabajo especializado con estos jóvenes”.
La instalación del servicio se diseñó en tres etapas, con el propósito de ir generando experiencia y fortaleciendo las relaciones entre las distintas instituciones que son parte del sistema de justicia juvenil.
La primera etapa comenzó el 13 de enero de 2024 con la llegada del servicio a 5 regiones del norte, de Arica a Coquimbo. La segunda se inició el pasado 13 de enero de 2025, con la implementación en las regiones del sur, comprendidas entre el Maule y Magallanes. La etapa final será en enero de 2026, con la incorporación de las regiones de Valparaíso, Metropolitana y O’Higgins.
Una vez el servicio esté implementado en todo el país, se cerrará definitivamente el Servicio Nacional de Menores.
Los cinco grandes cambios que trae el nuevo Servicio, tanto en lo administrativo como en técnico son:
• Modelo de financiamiento: El financiamiento ya no es a través del sistema de subvenciones, sino que ahora se hace a través del sistema de compras públicas, que permite entregar los recursos necesarios a los organismos acreditados para que cumplan sus labores con altos estándares de calidad.
• Servicio especializado: La atención es más especializada y personalizada, ya que cada joven cuenta con un plan de intervención individual, que de acuerdo con organismos internacionales es la estrategia más eficaz para la reinserción. A su vez, aumentan la cantidad de profesionales en las regiones, lo que permite una mejor atención.
• Trabajo estatal integral: El Estado en su conjunto, a través de distintos ministerios y servicios, tiene la obligación de asegurar el acceso de las y los jóvenes a las prestaciones que requieran para su reinserción, en áreas como educación, capacitaciones, salud y tratamiento del consumo problemático de alcohol y otras drogas, entre otras áreas prioritarias.
• Mediación Penal Juvenil: permite que víctima y joven acuerden una forma de reparar el daño, guiados por un mediador, transformándose en una oportunidad para el aprendizaje y el cambio. Ya hay experiencias exitosas en el norte en esta línea.
• Acompañamiento postegreso: Es una nueva herramienta donde el joven en forma voluntaria puede solicitar un proceso de acompañamiento una vez que haya cumplido su sanción para apoyarlo con los soportes que requiera, tales como redes en la comunidad, fuentes de ingresos o un lugar para vivir. Su duración máxima es de 6 meses, que es justamente un periodo particularmente crítico en los procesos de reinserción.